¿Cómo limpiar superficies de aluminio?

Trucos para limpiar superficies de aluminio

El aluminio es uno de los metales más abundantes de la Tierra y puede encontrarse en la mayoría de los hogares en artículos como ollas, sartenes, electrodomésticos y mesas. Limpiar el aluminio para que brille como nuevo es fácil si conoces los pasos adecuados y los mejores productos de limpieza de aluminio.

¿Cómo limpiar el aluminio?

El primer paso para limpiar los artículos de aluminio en tu casa es determinar si el aluminio está sin terminar. Un objeto de aluminio cubierto de laca, pintura u otro revestimiento debe limpiarse según los requisitos del revestimiento y no del metal. Si el aluminio no está recubierto, procede a seguir las instrucciones correspondientes al tipo de artículo o aluminio que vayas a limpiar.

Uso de soluciones a base de ácido para limpiar el aluminio

Para limpiar a fondo el artículo, necesitarás una solución a base de ácido. Un ácido es necesario para eliminar la capa oxidada que se desarrolla naturalmente en las superficies de aluminio. Puedes comprar limpiadores ácidos preparados comercialmente y diseñados para el producto que va a limpiar. También puede preparar en casa productos para la limpieza del aluminio utilizando elementos como tomates, limones o incluso manzanas. Aunque puedes utilizar ácidos como la lejía o el ácido fluorhídrico, tienen muchos efectos secundarios negativos y no hacen un mejor trabajo que los ácidos que se encuentran en los ingredientes naturales de su casa.

¿Cómo limpiar el aluminio cepillado?

Artículos de aluminio cepillado se encuentran típicamente en los aparatos domésticos como estufas, frigoríficos, accesorios de cocina y baño. El aluminio cepillado también se puede encontrar en los tapacubos de tu coche. Para limpiar este tipo de aluminio, necesitarás los siguientes ingredientes:

• 3 paños secos y limpios
• Una almohadilla de limpieza no abrasiva
• Vinagre blanco
• Agua
• Jabón líquido para lavar platos (opcional)
• Un cubo
• Un limpiador de cristales comercial
• Sellador transparente (opcional para los tapacubos)
• Guantes de goma para proteger las manos
• Pasos para limpiar el aluminio cepillado

– Coge un paño o el estropajo no abrasivo y empápalo en la solución de agua y jabón y luego úsalo para eliminar los restos del aluminio. Utiliza un movimiento circular suave con la almohadilla o, si la pieza tiene un «grano» claro, sigue la dirección del grano con la almohadilla.
– Prepara una solución de 50% de vinagre blanco y 50% de agua en un cubo. Utiliza uno de los paños y sumérgelo en el cubo, absorbiendo un poco de solución.
– Coge el paño húmedo y frótalo sobre el aluminio, con un movimiento circular y concentrándote especialmente en las zonas descoloridas.
– Una vez que hayas eliminado todas las manchas descoloridas, coge tu limpiacristales y rocía el aluminio por todas partes. Coge el paño limpio y seco restante y retira el limpiacristales con un movimiento suave y circular.
– Una vez que tu artículo de aluminio esté seco, puedes hacer que brille de verdad utilizando un pulidor de metales comercial. Utiliza uno de los paños secos para frotar suavemente una pequeña cantidad del abrillantador sobre el aluminio para sacarle brillo.
– Coge un paño limpio y seco y úsalo para eliminar cualquier residuo del pulimento que quede en la superficie.
– Como paso final, si estás limpiando tapacubos de aluminio cepillado, puedes cubrir los tapacubos con un sellador transparente para que el brillo dure más tiempo.

¿Cómo limpiar el aluminio fundido?

El aluminio fundido se encuentra a menudo en los utensilios de cocina y en algunos tipos de muebles. Para limpiar artículos de aluminio fundido necesitarás:

• 3 paños limpios y secos
• Una almohadilla de limpieza no abrasiva o un cepillo de dientes de cerdas suaves
• Crema de tártaro
• Zumo de limón o vinagre
• Guantes de goma para proteger las manos
• Un cubo o una botella de spray

Al igual que con otros tipos de aluminio, querrás limpiar primero cualquier suciedad o residuo en el aluminio. Puedes hacer esto con los mismos pasos para el aluminio cepillado.

– Si el artículo de aluminio fundido que está limpiando es una olla o sartén y tiene alimentos quemados en el fondo o en los lados, puede eliminarlos con la cocción. Añade agua a la olla y pon el agua a hervir durante unos minutos. A continuación, toma una espátula de madera o de plástico y utilízala para retirar los alimentos quemados reblandecidos de la olla. Si tu primer intento de eliminar los alimentos quemados no tiene éxito, repite el proceso pero añada un ácido al agua hirviendo.
– Algunas opciones posibles son el vinagre blanco, el crémor tártaro, el zumo de limón o de lima, el ruibarbo o el tomate picados o incluso las manzanas picadas. Deja que el agua hierva durante 10 o 15 minutos y luego utiliza la espátula para retirar los alimentos. Repite el proceso si es necesario hasta que haya eliminado todos los alimentos quemados.
– Si después de todos estos intentos todavía quedan alimentos, puedes probar con una lana de acero de grado muy fino. Asegúrate de utilizarla con suavidad y de moverla a favor del grano. Ten en cuenta que la lana de acero puede rayar tus ollas y sartenes, así que debes tener cuidado con este paso.
– Si tu olla o sartén está ligeramente sucia y puedes eliminar todos los restos con un paño o almohadilla, entonces puedes proceder con el siguiente paso de limpieza. Añade 4 tazas de agua a la olla y 3 cucharadas de crémor tártaro y llévalo a ebullición. Deja que hierva durante al menos 10 o 15 minutos.
– Puedes vaciar la solución de agua y crémor tártaro de la olla y dejarla enfriar hasta que puedas manipularla. Coge un paño, una almohadilla no abrasiva o un cepillo de dientes y frota suavemente la olla con un movimiento circular.
– Una vez que sientas que has limpiado la olla o la sartén, haz una mezcla en una proporción de media taza de zumo de limón por 1 taza y media de agua, o sustituye el zumo de limón por vinagre.
– Sumerge un paño en la mezcla y utilízalo para limpiar la olla de la solución de sarro. Puede que te resulte más fácil coger una botella de spray vacía y verter la mezcla en ella y luego usarla para rociar la mezcla en la superficie de aluminio y luego usar un paño para limpiarla.
– Por último, toma un paño limpio y seco y limpie la olla o sartén.

¿Cómo limpiar ventanas y puertas de aluminio?

Las ventanas de aluminio y las puertas acorazadas  necesitan un mantenimiento y una limpieza regular y frecuente para conservarse en buenas condiciones. La limpieza de estas superficies se debe realizar con los productos y materiales correctos, que no sean abrasivos. Si usas productos inadecuados los marcos pueden degradarse más rápido que por la suciedad o por las inclemencias del tiempo.

• Puedes utilizar un paño suave húmedo con agua caliente con un poco de detergente para eliminar las manchas.
• Luego aclara la zona con agua y seca con papel absorbente o con un paño suave.
• No debes realizar demasiada presión a la hora de frotar el aluminio. Es muy importante que la superficie a limpiar esté fría.